martes, 14 de abril de 2015

El beso

El rey de la caricia, el que marcó a un líder como Jesús para delatarlo, el que tiene la capacidad de protagonizar el nombre de una enfermedad: la mononucleosis. En fin, el símbolo por excelencia del amor, que también tiene su día. ¿Existe en los 365 días del año, alguno que no lo sea de nada? Tengo que mirarlo, ahora no lo sé.

Y como día señalado por no se sabe qué propósito al declarar cada dos por tres, día de algo, lo dediqué a dormir. Me parece que todavía no existe el día del sueño. Y hablando de sueños, por eso lo dediqué a él, para ver si podía enterrar los viejos, los rotos, los que ya no te llevan a ninguna parte pero siguen insistiendo llenándote de vanas esperanzas. No lo conseguí, pero hoy estoy nueva. Al menos a mi cuerpo le vino muy bien.

El beso se ha utilizado en los cuentos para despertar a la princesa; como título de películas (Empezó con un beso. George Marshall, 1959); es el exponente máximo en el romanticismo, como si su impacto fuese capaz de obnubilar la razón más férrea. Y es que, no nos engañemos, la especie humana es débil, cae rendida ante el deseo en cuanto te descuidas y el beso le abre la puerta confundiendo sensaciones de placer con el amor. El beso también es una trampa para encadenarte a personas nocivas, personas que no te aportarán nada y te quitarán todo, porque cuando alguien se adueña de tu voluntad, desapareces. El beso, en fin, me parece truculento y manido, sobrevalorado y ensalzado hasta el punto de merecer un día.

Tampoco quiero fastidiar a nadie con mi agnosticismo, porque la vida me ha enseñado a no creer en nada, en el beso tampoco, pero como hay que creer en algo para no sentirnos piedras, os diré que creo y seguiré creyendo en la amistad. Ese amor sin deseo en el que la confianza y la generosidad es real, porque se da sin mediatizar por sentimientos impregnados de pasión, que siempre lo tergiversan todo. Tal vez a través de ella se llegue al deseo, no será la primera vez, pero siempre construiremos una relación mejor cimentada porque empieza por compartir valores, ideas, formas de ser y ver la vida, y no al revés, como sucede cuando el beso sucumbe a una mirada llena de matices sospechosos de posesión.

En fin, que ustedes se besen bien.

12 comentarios:

  1. Hay otros besos que no implican deseo, sino amor por la persona a la que se lo das. Besos de amistad, algunos de cortesía, otros, incluso, fingidos. No sé por qué nos ha dado por dedicarle a todo días, pero si en el día del beso nos dio por regalar de los buenos a manos llenas, bienvenido sea.

    Ah, un beso!!! Que se te quiere!!

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    1. Estos besos siempre serán bienvenidos. Yo también los doy, sabes que me refería a su majestad el beso.

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    2. Su majestad el beso ha hecho que muchos nos volvamos republicanos.

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    3. Y a no creer en el amor a simple beso.

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  2. A mi lo que me da envidia es poder/saber dedicarte un día a dormir.Buen post.
    Besos castos.

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    1. Eso se consigue con los años, Marga y te aseguro que no compensa. Gracias por pasar.

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  3. Sin olvidar el beso de la muerte. De pequeño una película con ese título me dejó impresionado. La vi en un cine de barrio y creo que era apta para todos los públicos. Aún recuerdo la imagen del psicópata, protagonizado por Richard Widmark, empujando a una anciana en silla de ruedas por una escalera. Acompañaba el crimen con una risa de hiena.

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    1. Sí señor y el de la española, que no he tocado la copla. Tenemos que vernos, nos vamosd a olvidar.

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  4. Hoy he llenado de besos a mi nieta y le he dado unos cuantos a mi hija, llenos de amor y de ternura. Esos besos son maravillosos :)

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    1. Y siempre lo serán, pero tú sabes que yo no habalaba de esos. Y mira si son importantes, que voy a buscar un gato solo para darle achuchones y besos, aunque no es lo mismo, pero mejor que nada.

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  5. Es curioso lo que dices sobre la celebración diaria de algo casi cada uno de los 365 días del año. Por si ya fuera poco, a veces he escuchado que un mismo día era el día internacional de dos cosas distintas... a la vez. Osea que no debe haber un único director de orquesta para estas celebraciones. Todo lo bueno si breve dos veces bueno, sigue siendo real. Me quedo con tu expresión de "su Majestad El Beso". Gracias, que la vida , a veces, se parece a un chat y es bueno...

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    1. Me gustaría que no fueras anónimo, pero estás en tu derecho. Gracias por comentar este espacio que es como mi backup emocional.

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